Gonchi (Gonzalo Conti): Inició su carrera deportiva como jugador de voley, vicio que despuntó durante casi 10 años en el Club Ciudad de Buenos Aires, llegando a jugar en la vieja Div. de Honor, e incluso estar en la Preselección Juvenil. Pero su carrera se vió truncada cuando, gracias a la economía de este país, debió comenzar a trabajar para sustentar sus primeros años en la carrera de Sociología en la UBA, donde no soportaría más de dos años. Finalmente, y como todo deportista frustrado que elige no ser árbitro, se recibió de Periodista a fines de 2008 en el Instituto TEA, donde conoció al otro autor de este blog.
Vonadeo (Germán Esmerado): Toda una vida dedicada al deporte para terminar en nada. Así podría definirse la carrera de este individuo nacido en 1983 y que actualmente reside en el porteño barrio de Núñez. De purrete fue gran jugador de fútbol, de remate potente y mucha pachorra, características que aun mantiene. Luego se dedicó de lleno al básquet en el Club Náutico Buchardo, casaca que defendió durante 10 años en las divisiones B y C de la Federación de Capital Federal. Se lo recuerda por su puntería en los disparos de 3. Tuvo que abandonar la práctica del baloncesto porque los horarios de la facultad le coincidían con los de entrenamiento. Se recibió en diciembre de 2008, misma camada que el co-autor de este blog, Gonchi. Pero el vínculo con el deporte no se termina acá: Lamolina diría “siga siga”.